Especialistas en litigios generales, derecho transaccional, asuntos inmobiliarios y asesoría contable. Nos ocupamos de todas sus necesidades y las de su negocio con un enfoque meticuloso y pro activo. Ofrecemos un valor que significa ir más allá de lo esperado para ayudar a nuestros clientes a lograr lo extraordinario.
miércoles, 27 de septiembre de 2023
RETOS, TENDENCIAS Y PROPUESTAS DEL SISTEMA DE SEGURIDAD SOCIAL APLICADO AL TALENTO HUMANO
Abg. Pedro L. Naveda S.
INTRODUCCIÓN
Los retos, tendencias y propuestas del sistema de seguridad social aplicado al talento humano son diversos y cambiantes. En general, se busca mejorar la calidad de vida y el bienestar de los trabajadores, a través de políticas públicas y programas que permitan garantizar el acceso a servicios de salud y pensiones adecuados. Entre los retos se encuentran la falta de recursos financieros para mantener y mejorar los sistemas de seguridad social, la necesidad de promover una mayor inclusión y participación de los ciudadanos en la planificación y gestión de estos sistemas, y la importancia de proteger los derechos laborales de los trabajadores en un entorno cada vez más globalizado y competitivo. Algunas tendencias actuales incluyen la implementación de tecnologías digitales para mejorar la eficiencia y la transparencia de los sistemas de seguridad social y el enfoque en atender las necesidades de los trabajadores informales y migrantes. También existen propuestas para fortalecer la educación y formación en temas de seguridad social, así como para incentivar a los empleadores a ofrecer mejores beneficios y prestaciones a sus trabajadores.
1.- RETOS DEL SISTEMA DE SEGURIDAD SOCIAL APLICADO AL TALENTO HUMANO
A fines del siglo XX, los sistemas de seguridad social atravesaron dificultades en muchas partes del mundo.
Algunos creen que el sistema es demasiado costoso e impide el proceso de crecimiento y desarrollo económico por los costos que le impone al Estado, otros señalan la falta de niveles de protección y cobertura, A medida que aumenta el desempleo y otras formas de precariedad laboral, afirmo que la seguridad social es más necesaria que nunca.
Especialmente en los países desarrollados, los sistemas de seguridad social deben responder a problemas demográficos emergentes, como el envejecimiento de la población y los cambios en la composición familiar, que tienen implicaciones importantes para la financiación de la protección social.
En algunos países existe insatisfacción con la administración de la seguridad social, y las reformas propuestas incluyen una revisión del papel del Estado, las responsabilidades de los interlocutores sociales y la conveniencia de una mayor participación del sector privado. como lo establece la ley venezolana. Uno de los problemas fundamentales que enfrenta la seguridad social en la actualidad es que más de la mitad de la población mundial (trabajadores y sus dependientes) están excluidos de la protección de la seguridad social. No están cubiertos por los regímenes contributivos de seguridad social ni por la asistencia social financiada por el Estado, pero otra parte importante está cubierta solo en determinados casos.
En América Latina, la cobertura está entre el 10% y el 80% y está claramente estancada. Según la OIT, como lo demuestra su normativa y técnica en el campo de la seguridad social, se espera que la proporción de la fuerza laboral en los países en desarrollo eventualmente cambiará al empleo formal o remunerado, lo que incrementaría las cotizaciones a la seguridad Social. Los modelos anteriores de desarrollo económico y social en los países desarrollados suponían implícitamente que también se utilizarían en otras regiones.
Sin embargo, la experiencia en los países en desarrollo y, más recientemente, en los países industrializados sugiere que esta proporción ahora está estancada o incluso disminuyendo en muchos casos. Incluso en países de alto crecimiento, cada vez más trabajadores, a menudo mujeres, se encuentran en trabajos precarios, como trabajadores ocasionales, teletrabajadores e incluso trabajadores temporales. El aumento de los trabajos informales y desprotegidos plantea riesgos para los trabajadores tanto en la economía formal como en la informal.
Cuando preguntan sobre las perspectivas futuras de la seguridad social en Venezuela, hay que decir que son inciertas y preocupantes por la crisis económica y social que vive el país, la calidad y cantidad de los servicios de salud, pensiones y otros servicios sociales que brindamos están socavando debido a la falta de recursos financieros y de políticas públicas adecuadas para abordar este complejo tema. Además, la migración a gran escala de muchos trabajadores calificados y calificados ha afectado negativamente la capacidad del país para mantener y mejorar su sistema de seguridad social. Si bien algunos expertos han presentado propuestas y planes para la reforma de la seguridad social en Venezuela, actualmente no existe un consenso claro sobre cómo abordar adecuadamente esta crisis social y económica.
Los retos de la seguridad social en la actualidad son múltiples y complejos en Venezuela. Entre ellos se encuentran la falta de recursos financieros para mantener los servicios de salud y pensiones, la escasez de medicamentos, la emigración de trabajadores y profesionales calificados, y la falta de políticas públicas adecuadas para abordar estos temas de manera efectiva. Además, la inestabilidad política y económica del país también ha afectado negativamente la seguridad social de los ciudadanos, especialmente aquellos en situaciones de pobreza y vulnerabilidad.
A pesar de estos desafíos, es importante trabajar en soluciones y reformas que permitan mejorar y fortalecer los sistemas de seguridad social en Venezuela, para proteger los derechos y el bienestar de todos los ciudadanos.
2.- TENDENCIAS DEL SISTEMA DE SEGURIDAD SOCIAL APLICADO AL TALENTO HUMANO
En líneas generales, todos los análisis revelan una situación crítica desde distintos ángulos socioeconómicos, que se ha venido agudizando en los últimos años, pero que viene gestándose desde principios de siglo y tiene como causa fundamental el accionar y excesiva intervención estatal en la economía y en el ámbito de las relacionas laborales, pero la tendencia actual del sistema de seguridad social varía según el país y la región, pero en general se enfoca en proporcionar una mayor cobertura y acceso a servicios de salud y pensiones, y en implementar medidas para promover la inclusión y protección de los trabajadores más vulnerables. También se ha observado una tendencia hacia la digitalización de los procesos de seguridad social, para mejorar la eficiencia y la transparencia de los sistemas. Sin embargo, la falta de recursos y la necesidad de mejorar la coordinación entre las diferentes instituciones y sectores involucrados en la seguridad social siguen siendo retos importantes.
3.- PROPUESTAS PARA EL SISTEMA DE SEGURIDAD SOCIAL APLICADO AL TALENTO HUMANO
Del análisis de la situación del trabajo y de la seguridad social, se desprenden algunos resultados y propuestas de solución a la compleja y amplia problemática abordada, y que seguidamente se plantean de manera general.
Reconstruir la dinámica laboral en Venezuela pasa necesariamente por un proceso de recuperación del crecimiento económico, así como de políticas públicas alineadas al marco jurídico y constitucional, destinadas a la eliminación de la inseguridad jurídica y el fomento de la inversión, que permita la ampliación del sector privado y la consiguiente generación de valor y puestos de trabajo.
Más allá de la contingencia de la pandemia por COVID-19, el deterioro del mercado laboral es fundamentalmente la consecuencia de la crisis económica por la que viene atravesando el país al menos desde el año 2014, producto de la cual la economía venezolana en la actualidad se ha reducido.
En términos coyunturales, es crucial el combate a la importante escalada inflacionaria, que mina las contraprestaciones salariales que en términos reales reciben los trabajadores, lo que ha redundado en el aumento de los niveles de inactividad y desempleo prolongado.
La reducción de la inflación y el ajuste de las remuneraciones en términos reales a los niveles de la canasta básica familiar, podrían frenar el aumento de los niveles de pobreza y desigualdad y generaría las condiciones de estabilidad del sistema de precios necesaria para promover la inversión y por ende la generación de puestos de trabajo formales e incrementar el presupuesto de la seguridad social.
El trabajo formal asalariado, soporte vital del crecimiento y el desarrollo económico, ha perdido importancia como principal fuente de ingresos y ascenso social. Hay que rescatar el significado cultural y el valor social del trabajo asalariado y productivo. Hay que pontificar el trabajo decente como fuente de desarrollo integral del trabajador y su familia, establecidos en la Constitución y en la Ley del Trabajo.
Hay que recomponer las relaciones laborales y el diálogo social, así como la institucionalidad al servicio del trabajador para lo cual se hace necesario un cambio de rumbo en materia del modelo que seguimos, que permita revertir el deterioro socioeconómico general y del mercado laboral en particular. Se requiere un modelo económico alineado a los principios y normas constitucionales, que permita recuperar el aparato productivo nacional y volver a la senda del crecimiento y desarrollo sostenible e inclusivo.
Adicionalmente, se requieren políticas activas de empleo que estimulen la generación de empleos formales en un entorno atractivo para la inversión, complementadas con programas que permitan reeducar y reinsertar a la mano de obra, principalmente joven, en un mercado laboral abierto a la inversión y a la innovación tecnológica internacional.
Desde los ministerios de trabajo y educación debería impulsarse amplios programas de formación y capacitación técnica que incremente el capital humano y permitan disminuir la brecha entre los perfiles de puestos de trabajo demandados por las empresas y las capacidades de la mano de obra desempleada o inactiva.
En cuanto a la seguridad social y el sistema de pensiones y jubilaciones, se debería apuntar a una reforma del sistema para rescatar el cumplimiento de los principios básicos generales, y así garantizar la eficiencia y sostenibilidad intergeneracional que permita amparar de manera suficiente a todos los beneficiarios.
Hay que poner la mirada en la conformación de un sistema de seguridad social inclusivo, que permita entre otras cosas:
• Ampliar la cobertura de los sistemas de seguridad social para incluir a grupos que tradicionalmente han sido excluidos, como los trabajadores informales y las personas en situaciones de pobreza y vulnerabilidad.
• Fomentar la participación ciudadana en la planificación y gestión de los sistemas de seguridad social, para garantizar que se satisfagan las necesidades y expectativas de los usuarios.
• Promover la igualdad de género en los sistemas de seguridad social, asegurando que las mujeres tengan acceso adecuado a servicios de atención de salud y pensiones, y trabajando para reducir la brecha salarial y otras formas de discriminación de género.
• Implementar tecnologías digitales para mejorar la eficiencia y la transparencia de los sistemas de seguridad social.
• Promover incentivos para que los empleadores ofrezcan mejores beneficios y prestaciones a sus trabajadores.
• Fortalecer la educación y la formación en temas de seguridad social para mejorar la comprensión y la conciencia sobre estos temas.
• Coordinar mejor los distintos sectores e instituciones involucrados en la seguridad social para garantizar una implementación más efectiva de los sistemas.
ONCLUSIONES
En conclusión, hay que reconstruir las relaciones laborales en Venezuela se debe volver a la mesa de diálogo tripartito entre empresarios, trabajadores y gobierno.
Se debe forzar un debate democrático que discuta, de forma libre, las aspiraciones de empresarios y trabajadores y ofrezca soluciones a los graves problemas que enfrenta el sector. Para esta labor se puede partir de las recomendaciones entregadas por la Comisión de Encuestas de la OIT que plantean una serie de recomendaciones y una hoja de ruta para alcanzar “la reconciliación nacional y la justicia social”.
Por otro lado, la mejor forma de garantizar la seguridad social a los ciudadanos es mediante la creación y fortalecimiento de sistemas de seguridad social integrales y efectivos, que proporcionen protección a las personas en aspectos como la salud, pensiones y riesgos laborales, entre otros. Estos sistemas deben estar diseñados para garantizar la igualdad de acceso a la protección social para todos, independientemente de su situación laboral o económica, y deben coordinarse con los demás sistemas de protección social existentes. Además, es importante fomentar la participación ciudadana en la mejora de los servicios de seguridad social, utilizando herramientas como las encuestas y los buzones de sugerencias. También es importante promover la eficiencia y eficacia de los sistemas de seguridad social mediante la utilización de tecnología y digitalización para hacerlos más accesibles y eficientes para los ciudadanos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
COMPILACION SOBRE DERECHOS BÁSICOS DE LOS TRABAJADORES
Abg. Pedro L. Naveda S. Según la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras. • Todo ciudadano en la República Bolivariana...
-
Abg. Pedro L. Naveda S. CICLO DE SISTEMA: Actividad: Desarrollo de un SI, identificar una debilidad observada en el departamento de RRHH de...
No hay comentarios:
Publicar un comentario